¡Ya estamos por aquí otra vez! Llevamos mucho tiempo sin publicar posts, pero es que entre todas las bodas que hemos tenido este verano y las vacaciones ¡se nos ha hecho imposible! Sin embargo, para compensar, volvemos a lo grande, con una boda que os encantará ;)
Carla y Mauro se casaron una tarde de principios de mayo rodeados de lo que más quieren: familiares, amigos…naturaleza y animales. Así es, esta pareja se dio el sí quiero, como no podía ser de otra manera, en medio de un bosque natural precioso cercano a una masía de campo que habíamos escogido especialmente para ellos.
Y es que estos novios viven en una casa de campo, rodeados de animales porque Carla es una gran amante de este tipo de vida. Así lo repitieron una y mil veces sus invitados y así lo pudimos comprobar desde el primer momento que la conocimos. Por eso no nos extrañó cuando nos contó la sorpresa que quería darle a Mauro… ¡llegar al altar en caballo! Obviamente nuestra respuesta fue sí, e hicimos realidad su sueño… y nunca olvidaremos la cara del novio y los aplausos de toda la gente cuando la vieron aparecer. ¡Menuda amazona!
Como os imagináis, tanto la localización como el montaje y el estilismo giraban en torno al campo y la montaña, pero sin perder la elegancia que caracteriza a este parejón. Así que combinamos tonalidades verdes y crema para toda la decoración. ¡Y quedó precioso!
Pero vamos por pasos. La ceremonia fue al aire libre y oficiada por un emocionadísimo hermano de Carla. Como el bosque en sí ya era precioso, añadimos poca cosa más para que fuera algo sencillo, bonito y a la vez mágico. Los novios estaban encantados y se sintieron totalmente identificados. No faltaron los discursos, los abrazos, las risas y varias lágrimas de emoción. Los novios eran pura complicidad y alegría.
Al acabar los dirigimos a un suculento aperitivo que tuvo lugar al aire libre, bajo una preciosa haima verde con la que dimos solución a las amenazas de mal tiempo sin romper con la estética del entorno. Pero eso no impidió que todo el mundo disfrutara de lo lindo y que todo saliera rodado. ¡Por eso siempre tenemos un plan B muy estudiado y detallado en el que se disfruta tanto como con el plan inicial… y sino nos creéis; ¡mirad qué vistazas! Además, la presencia de un buen grupo de música y de un mago profesional hizo que todavía los invitados disfrutaran más.
Las primeras gotas de lluvia empezaron a caer justo cuando pasaban a cenar al gran salón, así que hubo suerte ¡y vaya cena! Desde que entraron los novios al ritmo del tema Smile de New Limit empezó la juerga… ¡fue un subidón! No sabemos si por la canción o la emoción contenida, ¡pero los novios entraron con muchísima fuerza y sus invitados se volvieron locos, hasta se subían en las sillas para ondear la servilleta! Y tan solo era el principio. Durante toda la cena hubo canciones compuestas por amigos íntimos, vídeos emotivos, entregas de ramos, regalos y detalles y mucha, mucha diversión. Había ganas de fiesta y eso se notaba, y es que envolvió la felicidad del ambiente por ver a Mauro y Carla como marido y mujer.
Y vaya forma de empezar la disco…los novios se pusieron delante de todos y lo que al principio parecía un baile lento tradicional se convirtió en un remix de las canciones más modernas mientras la pareja lo daba todo siguiendo una coreografía inventada por ellos mismos. ¡Qué pasada! ¡Y qué furor causaron! Enseguida todo el mundo saltó a la pista de baile y no pararon hasta bien entrada la madrugada. ¡Fue un fiestón!
Si queréis ver más sobre la boda de Carla y Mauro, podéis hacerlo aquí.
Fotografía: Díez & Bordons
Carla and Mauro got married as they wanted in the middle of the forest. The reason is they really love animals and nature, specially Carla. She decided to surprise Mauro and came to the ceremony… riding a horse!
So everything in their wedding was inspired in the countryside: from the farmhouse to the decoration of the dinner and the invitations. After the ceremony they went for a snack under a beautiful green tent, matching the surroundings. And just when they came to dinner it started to rain!
The couple entered the dinner dancing Smile, by the New Limit, and the people went crazy! From the start to the end there were a lot of surprises, presents, videos, speeches and songs.
When it was the moment to open the dance, Carla and Mauro started the wals but suddenly the music changed and became a remix of the liveliest songs! It was a great show! After that they started to party until sunrise.
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